Debemos ser conscientes de la importancia del buen manejo de las energías.
Es conveniente tener presente que al hacerle reiki a otra persona, estamos relacionándonos con sus cuerpos energéticos. Entonces, debido a que estamos tratando con estos aspectos tan sutiles y que generalmente desconocemos, debemos contar con las herramientas adecuadas para lograr una sana sesión o canalización de energía.
De esta manera, estaremos ciertamente contribuyendo con la sanación del paciente de una manera responsable y también nos estaremos cuidando nosotros mismos.
Trabajo sobre uno mismo
Este es un punto vital.
Gran parte de nuestro esfuerzo debería estar dirigido a mejorarnos como personas. De esta manera, estaremos directamente purificando y ampliando el canal de reiki que somos. Lógicamente, cuando somos consecuentes con nuestros principios, mejor reiki somos capaces de canalizar.
Mediante la autopurificación, relajación, meditación, visualización y autocrecimiento es que realizamos nuestro trabajo. Un reikista dedicado recita diariamente los principios durante la meditación, realiza su autotramiento. Además podemos practicar ejercicios que los maestros enseñamos en los talleres.
Que no nos cueste reconocer, es asi se recibe los beneficios de Reiki según el calibre de la persona que lo canaliza.
El poder de Reiki es ilimitado, se reciben los beneficios según vayamos completándonos como canal.
Es necesario comprender correctamente la esencia de Reiki ,
Amor, Armonía y Sanación
y esforzarnos por mejorar como individuos. Sanar nosotros.
Se baja el nivel de conciencia por sentimientos como el egoísmo e ira, la resonancia con el Gran Universo se debilita, la calidad de la vibración de Reiki que transmitimos baja o queda cambiada por energía de baja calidad.
Si bien el taller de iniciación en cualquiera de los niveles de Reiki es de 5 a 10 horas (1 ó 2 días), eso es solo la Graduación, la Iniciación.
El camino se inicia cuando salimos del taller,
ahí empiezamos a aprender y crecer cada día más como reikistas o reikianos.
Es conveniente tener presente que al hacerle reiki a otra persona, estamos relacionándonos con sus cuerpos energéticos. Entonces, debido a que estamos tratando con estos aspectos tan sutiles y que generalmente desconocemos, debemos contar con las herramientas adecuadas para lograr una sana sesión o canalización de energía.
De esta manera, estaremos ciertamente contribuyendo con la sanación del paciente de una manera responsable y también nos estaremos cuidando nosotros mismos.
Trabajo sobre uno mismo
Este es un punto vital.
Gran parte de nuestro esfuerzo debería estar dirigido a mejorarnos como personas. De esta manera, estaremos directamente purificando y ampliando el canal de reiki que somos. Lógicamente, cuando somos consecuentes con nuestros principios, mejor reiki somos capaces de canalizar.
Mediante la autopurificación, relajación, meditación, visualización y autocrecimiento es que realizamos nuestro trabajo. Un reikista dedicado recita diariamente los principios durante la meditación, realiza su autotramiento. Además podemos practicar ejercicios que los maestros enseñamos en los talleres.
Que no nos cueste reconocer, es asi se recibe los beneficios de Reiki según el calibre de la persona que lo canaliza.
El poder de Reiki es ilimitado, se reciben los beneficios según vayamos completándonos como canal.
Es necesario comprender correctamente la esencia de Reiki ,
Amor, Armonía y Sanación
y esforzarnos por mejorar como individuos. Sanar nosotros.
Se baja el nivel de conciencia por sentimientos como el egoísmo e ira, la resonancia con el Gran Universo se debilita, la calidad de la vibración de Reiki que transmitimos baja o queda cambiada por energía de baja calidad.
Si bien el taller de iniciación en cualquiera de los niveles de Reiki es de 5 a 10 horas (1 ó 2 días), eso es solo la Graduación, la Iniciación.
El camino se inicia cuando salimos del taller,
ahí empiezamos a aprender y crecer cada día más como reikistas o reikianos.